El trasplante capilar es un universo en continuo crecimiento, gracias a las invenciones a nivel médico y tecnológico que se realizan frecuentemente en este ámbito médico- estético que cada día adquiere mayor popularidad.
La pérdida del cabello es una problemática que millones de personas padecen alrededor del mundo, y es con el propósito de satisfacer la creciente demanda de los pacientes, que se han desarrollado diversas tecnologías, cada vez más especializadas, que permiten obtener resultados alentadores.
Las dos principales técnicas que se practican alrededor del mundo son las llamadas FUT (Follicular Unit Transplantation o Trasplante de Unidades Foliculares) y FUE (Follicular unit extraction o Extracción de Unidades Foliculares). Pero, ¿en qué consisten?, te lo decimos a continuación.
La FUE, es una técnica en la que, con ayuda de microscopios se extraen individualmente los folículos pilosos de la zona donante, para posteriormente ser implantados en las áreas de calvicie. Este procedimiento requiere que el paciente se afeite la zona donadora, pero tiene la ventaja de no dejar cicatrices visibles.
Esta Extracción de Unidades Foliculares puede llevarse a cabo empleando diversos instrumentos, en base a lo cual recibe diversos nombres. Podemos mencionar en primer lugar la FUE clásica, en la que se emplea una aguja en forma de sacabocado conectado a un micromotor que extrae el folículo piloso, sin dañar la raíz del cabello. Tenemos también la FUE zafiro, que se realiza con cuchillas en forma de V elaboradas de esta piedra preciosa. Debido a que son más afiladas, proporcionan menos daño a los tejidos y el período de curación es más corto.
En adición está la técnica DHI, la cual es también un tipo de FUE en la que se utiliza una especie de lápiz denominado Choi-pen, el cual permite implantar directamente los folículos, evitando la necesidad de realizar un canal previamente. Este instrumento brinda la oportunidad de reducir el tiempo empleado en la implantación.
Por otra parte, tenemos el FUT, también conocido como técnica de la tira, que consiste en cortar una porción lineal de cuero cabelludo de la región donante (la cual suele ser la de la zona posterior de la cabeza), dividirla en secciones y prepararla, extrayendo los folículos pilosos para ser implantados posteriormente en las áreas a tratar. Si bien con esta técnica no es necesario afeitar el área donante, los pacientes tendrán una cicatriz larga en el cuero cabelludo debido al corte que se realiza en el mismo. Este procedimiento, que data de los años 90, fue el pionero en ser utilizado para tratar la alopecia, pero poco a poco está siendo desplazado por la FUE, y reservándose su uso solo para casos específicos.
Es conveniente mencionar también la técnica del trasplante de vello corporal (BHT, por sus siglas en inglés), que consiste en la extracción de folículos pilosos de zonas distintas al cuero cabelludo. Este procedimiento es útil en aquellos casos en los que las áreas de la cabeza que habitualmente funcionan como donantes, presentan alopecia o ya han sido agotadas debido a procedimientos anteriores.
Como pudimos ver, cada técnica tiene sus ventajas y desventajas, por lo que siempre es necesario que se realice una evaluación individualizada del paciente para conocer qué resulta más conveniente en cada caso y cual método le podrá proporcionar los mejores resultados.